Quizá Google ha querido bromear sobre las gafas de realidad virtual de Oculus VR con su Cardboard VR, un invento de cartón que convierte un smartphone en unas gafas de este tipo, pero está claro que el dispositivo de visualización de la compañía recién adquirida por Facebook es uno de los que más expectación genera en el mercado. En marzo, Oculus empezó a admitir reservas de sus segunda generación de gafas Oculus Rift DK2 (kit para desarrolladores) a un precio de 350 dólares y hoy ha anunciado que empezará a servir las primeras unidades a mediados de julio.
La mala noticia es que Oculus ha recibido más de 45.000 reservas ya de las gafas, de modo que si no reservaste unas en marzo todavía deberás esperar bastante a tener unas, tanto que el fabricante ha señalado que este mes sólo será capaz de servir unas 10.000 unidades.
La empresa ya adelantó que en las primeras 36 horas ya habían recibido más de 12.500 peticiones, lo que quiere decir que si reservaste unas tan sólo al día siguiente de abrirse el plazo es probable que también tengas que esperar. Para tener una referencia, Oculus vendió unas 50.000 unidades de su primer prototipo y este parece que va a tener un éxito muy superior. Lo que es incierto es cuál será después el mercado real de este tipo de gafas, pero muchos otros fabricantes incluyendo el gigante Sony (con su proyecto Morpheus), están preparando sus alternativas ya que puede ser una de las próximas revoluciones del entretenimiento digital.
Por otro lado, resulta interesante, aunque pueda parecer sólo una broma, el curioso dispositivo Cardboard VR fabricado en cartón que Google ha regalado a sus asistentes a la conferencia para desarrolladores I/O. Y es interesante no sólo por cómo está construido sino por sus significado, y es que no sería extraño que Google lanzase una versión con una construcción más duradera que pudiera incluso competir con las gafas creadas como tales, sencillamente acoplando un smartphone a un sistema de lentes.
