China y Estados Unidos han tenido recientemente una guerra comercial. La mayor afectada fue el gigante tecnológico Huawei que veía peligrar el uso de Android, cuya propiedad es de Google. Esto es debido a que este sistema operativo pertenece a una empresa estadounidense.
Por parte de la compañía china ha estado preparando públicamente medidas de contingencia para una variedad de situaciones, incluido el reemplazo de software para sus smartphones en caso de que Android se vuelva inutilizable como resultado de la prohibición. Sin embargo, uno de los miembros de su junta ha revelado que no tiene intenciones de abandonar Android, lo que contradice lo que los ejecutivos han dicho anteriormente.
Contradicciones tras confirmar el uso legítimo de Android
Catherine Chen, vicepresidenta principal, dijo ayer a la prensa que Hongmeng OS de Huawei, que los medios de comunicación más amplios han considerado como un potencial sucesor de Android, fue diseñado para uso industrial y contiene una cantidad de código inferior al que tendría un moderno sistema operativo pensado para dispositivos de consumo. La agencia de noticias Xinhua, respaldada por el estado, informa que Huawei espera permanecer con Android en sus teléfonos en un futuro inmediato.
La semana pasada, uno de los presidentes rotativos de la compañía, Liang Hua, también declaró que Hongmeng no era apto para reemplazar a Android, ya que estaba destinado a al Internet de las cosas. Más tarde, Hua declaró que no estaba seguro de si Hongmeng podría implementarse como un sistema operativo para teléfonos móviles en el futuro, informa Technode.
El mes pasado, Andrew Williamson, vicepresidente de asuntos públicos y comunicaciones de Huawei, dijo a Reuters que la compañía estaba «en el proceso de lanzar un reemplazo» para Android y que «Hongmeng se está probando, principalmente en China».
En la Cumbre del G20 se llegó a un acuerdo entre las dos partes, por lo que se levanta la prohibición de venta de componentes estadounidense a la empresa china Huawei. Son buenas noticias para todas las empresas y para el avance de la tecnología en general.
Además, la administración de Trump afirmó que «Huawei no representa un riesgo de seguridad nacional» para un puñado de empresas. El propio Presidente de EEUU declaró: «Enviamos y vendemos a Huawei una enorme cantidad de productos que forman parte de lo que fabrican, y yo he dicho que eso está bien. Seguiremos vendiéndoles estos productos».
La compañía sigue con la intención de actualizar una lista de 17 de sus teléfonos a Android Q. Por lo que Huawei ha decidido finalmente que Android es la mejor opción por ahora, mientras no tenga una prohibición que obligue a usar su propio software.