En muchas ocasiones cuando de smartphones hablamos nos centramos en aspectos como la potencia, los materiales, pero obviamos un aspecto importante, el proceso de fabricación.
Con los años nuevas técnicas nos permiten disfrutar de acabados más y más perfeccionistas, haciéndonos disfrutar de diseños espectaculares. El Honor 8X es uno de esos teléfonos que a pesar de seguir una linea de mercado definida, ha sabido dar un paso al frente con una nueva técnica de fabricación que marca la diferencia.
El ensamblaje Chip on Film (COF) entrega un frontal más aprovechado
Hoy día las pantallas son la referencia dentro del mundo smartphone. Paneles cada vez más vistosos y mejor aprovechados nos permiten reducir el número de elementos que interfieren en la visualización de la misma.
El elemento más relevante que vamos a encontrar en este nuevo Honor 8X es el conocido como ensamblaje tipo COF. Gracias a este nuevo sistema, los captadores se colocan detrás del panel y no sobre el. Esto nos permite una visualización mejorada en lo que han llamado Zero Limits.
Este sistema es tecnología punta en materia de montaje en productos del sector y aun siendo más cara, Honor ha querido implantarla en su nuevo Honor 8X, marcando una diferencia notable en aprovechamiento de pantalla con respecto a rivales como el Xiaomi Redmi Note 6 Pro o el Xiaomi Mi 8 SE que puede enmarcarse en una gama de competencia directa.
Hoy será presentado en España
Esta tarde Honor presentará de forma oficial el nuevo Honor 8X en España. El dispositivo que superará en más de un 90% el ratio de pantalla en el frontal viene acompañado de una configuración interesante dentro de la gama media actual.
El Honor 8X cuenta con un panel frontal FullHD+ de 6.5 pulgadas. Una generosa pantalla que no se hace grande a la mano. Esto se consigue gracias a un aumento en el ratio de pantalla y no en el terminal.
En su interior tenemos el nuevo procesador Kirin 710. Este SoC fue lanzado por Huawei para hacer competencia a su homólogo en nomenclatura del fabricante americano Qualcomm. Un procesador catalogado como gama media «premium» que promete un gran rendimiento. Se acompaña de 4 y 6 GB de RAM y 64 o 128 de memoria que puede ser ampliada de forma externa.
En la parte trasera encontramos una cámara dual en disposición vertical muy al estilo Huawei. Estas reciben la ayuda del módulo de IA que encontramos en el nuevo Kirin 710 capaz de mejorar nuestras capturas.
Cierra la configuración una batería de 3750 mAh y un puerto de carga que no nos ha gustado. Es poco comprensible que un modelo de finales de 2018 aun no haya dado el paso a USB de tipo C para su recuperación energética.
