Tras las pantallas multi táctiles, uno de los “santos griales” que buscan las más importantes empresas de tecnología, son las pantallas capaces de ofrecer una retro alimentación táctil en su superficie, lo que significa que sean capaces de “hacer sentir” lo que hay en pantalla para, por ejemplo, escribir más rápido y más cómodo, para manejar elementos del dispositivo sin mirar o para servir a personas con limitaciones visuales. Apple, Disney Research y otros fabricantes están invirtiendo grandes sumas en estas tecnologías, pero hay una empresa, Tactus Technology, que desde hace tiempo tiene una pantalla que cambia su forma de manera casi mágica. Está tecnología se mostró ya en CES 2013, pero ahora gracias a su acuerdo con la empresa Wistrom y una nueva inyección de capital, podrían pronto poner en el mercado un accesorio que hará que las pantallas de las tabletas cambien de forma para contar con teclados u otras interfaces en relieve.
La pantalla funciona utilizando lo que llaman “micro fluidos” que se encuentran dentro de un delgado panel y se activan por impulsos eléctricos en ella para formar burbujas que puedes tocar y pulsar. Su primer producto esperan que sea un accesorio para el iPad mini que añade sólo 2,5 mm de grosor al dispositivo. Por otro lado, las demostraciones actuales que se han visto no explican hasta qué punto puede modificarse la pantalla o cómo se realiza el control, ya que simplemente muestran que con un deslizador en el lateral se puede hacer que el teclado en pantalla se resalte con las burbujas de micro fluidos. Sin embargo, no se explica si pueden tomar otras formas personalizadas o si las apps podrían comunicarse con la pantalla para cambiar de forma de manera dinámica (parece que en esta versión la pantalla simplemente se activa para tomar la forma de un teclado).
Si te fijas en las demostraciones en vídeo, puedes apreciar también como las “burbujas” que se crean para dar forma a las teclas parecen no desaparecer del todo cuando se desactiva, pero los responsables de la empresa afirman que en el producto final la superficie quedará perfectamente plana de manera inmediata. Por último, la tecnología de Tactus tiene un problema importante y es que requiere remplazar el cristal del dispositivo por su pantalla, que tiene un tacto más plástico y que, aunque sus responsables aseguran que es muy resistente y puede usarse en los mismo entornos que una tableta, seguramente carece de la resistencia a arañazos de los cristales como el Gorilla Glass que se emplean en las tabletas y teléfonos de gama alta. Así, estas pantallas táctiles de micro fluidos pueden ser una alternativa para dispositivos o usuarios para los que esta retro alimentación es muy beneficiosa, pero no parece que al menos de momento, mucha gente quiera reemplazar su ultra resistente pantalla Gorilla por un panel más frágil aunque pueda hacer surgir botones táctiles.